En cada cosa hay otro lado

que mis palabras nunca alcanzan,

así como las huellas en la nieve

no son la nieve que las cubre,

así como mi nombre no soy yo

sino el disfraz que me resguarda.

 

Tiene la flor un otro lado

como el oculto de la luna,

en la palabra agua está la sed,

en donde digo yo solo hay preguntas.

¿No es el lenguaje laberinto?

¿Desfiladero en la neblina?

¿No es el poema un pobre intento

que desemboca en la derrota?

Si digo pan sigo con hambre,

Si digo yo me encuentro al otro,

Si digo luz nada se enciende.

Si digo dios nombro su ausencia.

 

En cada cosa hay otro lado

que mis palabras nunca alcanzan.

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